viernes, 18 de noviembre de 2011

Reflexiones sobre sentirse nada

Dedicada a Amparo, a la que aseguré que no escribía poesía. Quizá se aproxime o quizá no.

De finales de agosto del 2005.

No juego, ni finjo, ni lloro, ni río. Ni soy, ni estoy, ni aparezco, ni desaparezco. Ni existo, ni muero. Ni crezco, ni menguo. Nada. No hay nada.

No busco, no encuentro, no siento, no quiero.
No sueño, no lucho, no grito. Nada.
No lato, no vibro, no tiemblo. No hay nada.
Sólo la cáscara llena de algo que no me atrevo a examinar. Nadie mira lo suficiente para saber que algo pasa. Ni siquiera yo.

He visto a la luna crecer cada noche un poco más. Entre nubes oscuras, asomando brillante, burlona, apenas un retazo de lo que será.

He oído el río en la noche, cuando la vegetación esta oculta. Viniendo a mí, en murmullo, en rugido.
Mañanas azules, bajo el sol indiferente. Horizontes sin límites, cielo enorme y sólo, tan sólo.

Las tormentas se han insinuado cada tarde, lejanas. Detrás de nubes amenazantes. Sin lluvia. Sonidos y luces perdidos en la distancia.

He soñado con tu mano acariciando a una criatura en una jaula. He soñado que la criatura era yo.

He contemplado trenes en la lejanía. Huyendo, melancólicos del sol del medio día.
Duelen las noches, duelen los días, duelen los pensamientos.

9 comentarios:

  1. May, me has sorprendido gratamente, no sabría definir si es poesia o prosa poética, de cualquier manera me ha gustado, a pesar de la desolación que vas dejando en cada estrofa.
    Un abrazo

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  2. A mi también me sorprendes May. Y en cierta forma es un placer dejarse sorprender así, de forma tan íntima, con estos versos, con estas reflexiones. Me ha impactado la imagen de la mano y la jaula. Enhorabuena.
    Ginés

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  3. Genial, simplemente genial.
    Para mí es una canción, a medida que la leía...escuchaba hasta la melodía e incluso la voz del cantante (que no la mía, que cuando canto parecen que matan un gato), creo que podría ser una canción de "Delafé y las flores azules".
    un achuchón fuerte

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  4. Cuando te inunde una enorme alegria, no prometas nada a nadie. Cuando te domine un gran enojo, no contestes a ninguna carta.

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  5. Esta dedicacion bien merece un comentario,

    Los sentimientos que has utilizado para describir !la nada! se invierten para conseguir el deseo de configurar esperanza, todo, es valido para entender,todo para luchar,todo para inspirar,todo, para que te escuchen,todo, para vaciar ,todo para estar solo porque lo necesitas,todo para encontrar las claves de nuestra maduracion,....amiga mia nos gusta escribir cosas bellas incluso cuando estamos derrotados,quiza eso es lo que vale la pena en este mundo de las letras bajo el cual nos cobijamos. amparo

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  6. Gracias Mai. Puedes cantarla que no se lo voy a decir a nadie y a los amigos nos gustas tú y contigo incluimos a tu voz.

    Anónimo. Yo antes de saber que estoy alegre, río y antes de saber que estoy triste, lloro. Así que para cuando llega ya he cometido los dos errores. Prometer y contestar la carta. Pero tu reflexión en si, es especialmente sabia.

    Mi querida amiga Amparo, que bien me lo pasé ayer, eso que vaya por delante. Encarna, Eloy, cervezas, tapas, conversación convirtieron la tarde en algo especial, pero tú eres el alma.
    Gracias. Necesitamos tiempo y tranquilidad, para ver tu libro de vida, para hablar con profundidad e incluso que me cuentes tus sueños.
    Realmente la escribí en el 2005, e incluso podría poner lugar. No me gusta viajar a ese recuerdo. Aunque como se dice de aquellos polvos surgieron estos lodos.

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  7. Todo y nada, perderse en el todo es fácil, perderse en las pequeñas cosas aún más, sin embargo, desde lo sencillo a lo complicado o desde éste al primero nos hace ser conscientes de nuestra insignificante importancia en el todo pero necesarios para que no exista la nada.
    Saludito amistoso.

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  8. Sentirse nada es lo peor del mundo. Perder tu norte hasta ese punto que dejas de ser y valorarte, es como vivir siempre bajo el agua.

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  9. He leído y releído y vuelto a leer y me sigo estremeciendo. Hay una dulce sensación a desazón que... sin quererlo... entra y duele... con un dolor suave, pero punzante.
    No sé si será o no poesía... lo que no cabe duda es que es un sentimiento demoledor.

    Un abrazo.

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