jueves, 14 de febrero de 2013

Como no: San Valentín

¿Qué es San Valentín? Sé que mucha gente cree que es un invento para sacarte la pasta justo después de la cuesta de enero... y probablemente tienen razón, aunque se trate más bien del aprovechamiento de una fecha ya existente. Llevo unos cuantos días investigando el asunto para Amanecer con olor a pan, la información está ahí para cualquiera que sienta curiosidad: que si un sacerdote al que un emperador romano del sigo tercero se cargó, que si un arzobispo de un sitio con un nombre muy raro..., del primero se dice que casaba en secreto a los jóvenes, porque se había decidido que los soldados servían mejor solteros (mira tú por donde, el mismo argumento que utiliza la iglesia), pero a mí me gustan más otras versiones del origen: es la época en la que en los países nórdicos los pájaros se aparean o incluso esas celebraciones de la fertilidad que tienen pinta de ser más antiguas que la misma Roma: Las lupercalias.

Venía yo pensando (desde la cama aquí) que ahora mismo, tal como está la situación, necesitamos no un día como este, necesitamos cien o doscientos. Manifestar, celebrar, pensar, como queráis llamarlo, en el amor quizá nos haga un poco más felices. En el amor a vuestra pareja si la tenéis, en el amor a vuestros amigos, a vosotros mismos, recordarlo y recordárselo, darle la importancia que tiene en vuestra vida. Para eso no es necesario comprar regalos, ni salir de cenas. Una mirada, una atención, un te quiero real, un reconocimiento de que están ahí y de que estáis ahí. Puede ser más que suficiente.

No se trata de que no lo sintáis todos los días. Se trata (pienso yo), de pararse a pensarlo. Vivimos tan aprisa, tan agobiados, tan inmersos en la dureza diaria que es muy posible que ni siquiera mires a quien tienes al lado. Hazlo.

Me ha hecho gracia leer uno de los poemas, el primero que no es tan personal, que un amigo Simplicisimus (su blog está ahí entre mis favoritos), porqué también he pensado en ello. En los cabreos que este día puede ocasionar entre las parejas. Recuerdo cuando era muy joven y más romántica lanzarme a la búsqueda del regalo perfecto, acompañado de su tarjeta, la elaboración y los preparativos para esa cena especial para luego recibir aquello de: "yo no necesito un día especial para demostrarte que te quiero, prefiero celebrarlo un día cualquiera". Solo que ese día cualquiera no llegaba nunca. Era frustrante. Y no por el regalo. Nunca he necesitado regalos caros ni he medido el amor por su precio, a no ser, claro, que me regalaran relojes de repisa de plástico del malo o flores artificiales en macetas. Con el tiempo y la madurez, creo que lo que necesitaba sentir es: he estado pensando en ti, en lo que te gusta y en lo que no, en como eres y que te ilusiona. Unas palabras en una tarjeta, una flor, incluso una botella de vino del supermercado para la cena especial hubiera sido más que suficiente.

Con el tiempo, eso sí después de algunos años porque soy cabezota, yo misma deje de pensar en esta fecha, incluso de notarla en el calendario.


Y bueno, después de esta casi confesión, yo animaría a todo el mundo a celebrarlo. Sonreíd, disfrutad, amad. a vuestras parejas, a vuestros amigos, a vosotros mismos, e incluso a aquellos con los que os crucéis hoy.

3 comentarios:

  1. Si, en ocasiones se excudan -o nos excudamos (ya sé que va con ese, pero... "excusa" no- en lo teórico... "Yo te amo todos los días", pero la realidad suele ser otra y como hoy no es el dia de San Excusín, no diré más.
    A nivel personal, pienso que es un día que sirve como excusa para tener un detalle extra, y pienso al igual que tú que no tiene porqué ser un "carísimo regalo".
    En la distancia me visualizo dándote un abrazo muyyy cálido.
    Feliz San Valentín mi pequeña May.

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  2. Un San Valentín tranquilo el mío. Gracias Simpli. Nunca he entendido bien esa actitud que se daba año tras año. Aunque pensándolo bien, es probable que él tampoco entendiera la mía, que también era año tras año. Bueno, lo pasado, pasado está.

    También deseo que hayas tenido un buen día de San Valentín, repleto de amor.
    Un beso, Simpli.

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  3. Casi me emociono con tu entrada, May. Tienes razón (ambos, Simplicisimus y tu), a veces nos descuidamos y excusamos para vadear ese dia enmarcado en el calendario. Lo cual me lleva, ademáa de a felicitarte por el enfoque y tu deseo bienaventurado, a proponer una segunda fecha de calendario amorosa, otro dia de enamorados. Ayer se lo comenté a mi enamorada. Propuse san sadurní (por el champán) aunque luego me dejé vencer por la retórica: san hipólito o santa leocadia. En todo caso, propongo que sea el 10 de abril, santa Magdalena (un santo y una santa), que nació en Verona y seguro que no estaría a favor de un regalo ostentoso. Digamos a nuestros enamorados y enamoradas que los/las queremos el 10 de abril.
    Un saludo con amor.

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